Hola. Lo prometido es deuda y aquí vengo con mi comentario de lo último que he leído de Vargas Llosa. Lo último que he leído es casi lo primero que él publicó. La ciudad y los perros (Alfaguara, 483 p., 2005).
Ya me vale leerme ahora este libro, pero no me gusta pecar de gran lector , pues no lo soy, ni tampoco tirarme el pegote de que me lo he leído todo, por que no sería verdad.
¿Merece la pena rellenar lagunas, cubrir huecos? En este caso, la respuesta es afirmativa. Sí que merece la pena.
El libro es brutal. no sólo por que está terriblemente bien escrito sino por su tratamiento sobre la alienación, la violencia contenida -y a veces no tan contenida-, las relaciones personales en un universo cerrado y asfixiante -bonita reflexión para aquellos de nosotros que no perdemos el olor a incienso y sacristía y para los que las más ínfimas cuestiones se convierte, a veces, en asuntos de honor-.
Hacerse con la novel cuesta un poco. Hasta que le pillas el truco de cómo está estructurada. Tampoco es que el lenguaje ayude del todo con sus giros peruano-americanos en el texto y que cuesta captar en todo su significado. Es un buen auxiliar el diccionario de americanismos de la RAE (/http://buscon.rae.es/dpdI/)
Lo dicho si no te lo lo has leido, hazlo.No pasa nada porque se te haya quedado a trás como a mí.
Primer viernes de Cuaresma
Hace 1 año
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3 comentarios:
Mi hijo lo leyó en el instituto el año pasado y acabó tocado.
Y yo, que soy fiel a Vargas Llosa, aún no lo he hecho.
Así que, lo haré. Ya le contaré.
Gracias
Pues te haremos caso, querido Chevalier, y lo leeremos.
Debo confesarte que no he leído nunca a Vargas Llosa, pero me pasa lo mismo que a ti, sería una tontería decir que sí lo he hecho cuando no ha sido el caso, por este motivo, si tengo que elegir un libro para estrenarme con Vargas Llosa, será este.
Un abrazo amigo.
A mí me ocurrió que leí demasiado joven tanto este de “La ciudad y los perros”, como “Pantaleón y las visitadoras”, por lo que están en mi lista de relecturas.
Con Mario siempre se acierta. Si te gusta su pincel erótico, te recomiendo uno menos conocido: “Los cuadernos de Don Rigoberto”
:-) Un saludo.
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