domingo, 6 de septiembre de 2009

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Hola. Esta entrada y las siguientes versarán casi en exclusiva sobre libros leídos en las últimas semanas. Lectura acumulada frente al mar y mecida en la brisa de la noche (¿queda un poco cursi?).
Este es el mejor de los leídos. Y he leído miles de hojas. Este solito se va a más de 900.
El libro consta de cinco relatos medianos que, más o menos, dan vueltas en torno a una idea común: Ciudad Juárez (México) y los asesinatos de mujeres. Los relatos se pueden leer en el orden que uno quiere porque siempre terminan rozándose como circunferencias tangentes.
El primer relato es el más alegre y fácil de leer. Es incluso divertido. En el fondo, hay una reflexión entre amor y sexo, en sus diferencias. Tal vez sea el que menos pueda cambiar de orden de lectura.
El segundo y el tercero son mis favoritos. Son demoledores, el camino de la vida y todas esas pequeñas y grandes cosas que terminan por configurarnos. En el segundo, la pena, la dejadez, la locura, la miseria del que no es mísero. Todo confluye para relatarnos la vida que no es vida de un buen hombre que no es hombre.
El tercero es literatura negra de la buena. Del sórdido mundo del boxeo y de los periodistas. Me reocrdaba el sabor de una gran película Más dura será la caída. Aunque el protagonista es negro, no pude impedirlo ( ni tampoco quise) y le coloqué la cara de Bogart.
El cuarto es un tanto plomizo en muchos pasajes. En verdad no es un relato es un documental de la terrible situación que vive la ciudad de Ciudad Juárez. A veces te pierdes con nombres, personajes, mujeres asesindas y violadas de maneras tremendas (el autor tiene el buen gusto de no entrrar en demasiados detalles escabrosos).
El último, cuando crees que te dan las soluciones te dejan las preguntas. Es muy bueno. No puedo hablar mucho porque lo destripo.

me queda una pregunta en el aire ¿por qué anagrama logra publicar tantos y tan buenos libros?